¿Tu bebé despierta durante la noche? Te decimos por qué

Los patrones de sueño de tu bebé son un tema complicado durante sus primeros meses de vida. Es un hecho que en el transcurso de las primeras semanas experimente una especie de “confusión” respecto a los horarios habituales para dormir, es decir durante la noche, ya que cuando estaba en tu vientre, él no sabía de la existencia de horarios o si era de día o de noche.

Como podemos ver, los patrones de sueño son aprendidos, pero una vez que se establecen, tampoco puedes dar por hecho que tu bebé va a dormir toda la noche: se estima que la mayoría de los recién nacidos despiertan cada 3 ó 4 horas y casi siempre requieren ayuda para volver a conciliar el sueño.

Existen múltiples factores por los que un bebé despierta durante la noche. Sabemos que los primeros meses después del nacimiento tu bebé son extenuantes, pues tus periodos de sueño también se vuelven irregulares. Por eso, te explicamos las 5 situaciones más frecuentes que interrumpen el sueño de tu bebé y cómo resolverlas. 

  • Hambre: Es la causa más frecuente de los despertares nocturnos. El tamaño de sus pequeños estómagos y la rapidez de su digestión impiden que el bebé quede satisfecho por largos periodos, así que la necesidad de alimento hará que despierte llorando. En este caso proporciónale la alimentación necesaria, ya sea al pecho materno o con fórmula, empleando la menor cantidad de luz y ruido posibles. Además de aportarle saciedad, alimentarlo le consuela y ayuda a retomar el sueño.
  • Cólicos: Con frecuencia son consecuencia de la alimentación. Para evitarlos, antes de volver a acostarlo hazlo eructar las veces que sea necesario dándole palmadas suaves pero firmes en su espalda. Muchas veces durante la realización de esta maniobra vuelven a quedarse dormidos.
  • Pañal sucio: La incomodidad de sentir su pañal mojado o sucio de popó también puede interrumpir el sueño de tu bebé. Es importante realizarle el cambio de pañal cada 3 a 4 horas, para evitar que esa molestia lo despierte. Incluso si tu bebé está durmiendo, realízale el cambio del pañal con movimientos suaves. En ocasiones su sueño es tan profundo, que no va a despertarse, garantizando unas horas más de buen dormir.
  • Rozaduras: Están relacionadas con el punto anterior. Es de suma importancia que en cada cambio de pañal apliques en su piel una crema o pomada que contenga óxido de zinc como Hipoglos, a fin de prevenir la aparición de molestas rozaduras que irritan su piel y le impiden conciliar o profundizar su sueño.
  • Factores ambientales: Una luz demasiado brillante, ruidos fuertes o persistentes, temperaturas extremas o una gran cantidad de estímulos visuales en la habitación donde duerme tu bebé también pueden afectar sus ciclos de sueño, ya de por sí cortos. Te sugerimos corregir estos factores en la medida de lo posible, para ayudarlo a conciliar y mantener el sueño durante la noche, de esta forma irá aprendiendo que la noche es para dormir.

Recuerda que los periodos largos de sueño son resultado de la maduración de su sistema nervioso y de la adquisición de hábitos, por lo que vas a requerir de mucha paciencia mientras esto ocurre, al menos durante su primer año de vida. Poco a poco irás notando que dormirá durante más horas y despertará en menos ocasiones durante la noche, lo cual también te beneficiará, pues dispondrás de más horas para dormir y descansar.

Tu bebé necesita tu apoyo y saber que siempre contará contigo en éstas y muchas otras situaciones, reforzando los lazos de amor y confianza entre ustedes. A esa edad los bebés no actúan con intención, por eso no debes creer a las personas que te dicen que tu bebé despierta para manipularte, simplemente tiene necesidades que necesitan ser atendidas.

Sin embargo, si sus despertares nocturnos son demasiado frecuentes y persistentes, es importante que lo revise su pediatra para determinar si su interrupción del sueño tiene otro origen que no has identificado.

Con amor y paciencia, vivirás esta etapa de poco sueño durante la noche más ligera. Recuerda que es un periodo pasajero y hasta necesario para comenzar a implementar los hábitos de sueño.